Una técnica que puedes usar si una persona te está criticando, es escuchar activamente y responder con preguntas curiosas, sin engancharte emocionalmente, sin ponerte a la defensiva y sin adoptar una postura sumisa.

Veamos un ejemplo de crítica destructiva y lo que sería responder agresiva, pasiva, pasivo agresiva y asertivamente:

Critica destructiva: “Eres un inútil, todo el tiempo te estás equivocando, porque no puedes hacer las cosas bien”.

Respuesta agresiva: “Por lo menos yo respeto a los demás, tú siempre estás criticando, ni siquiera puedes comunicarte con respeto. Por lo menos yo si respeto a las personas”.

Respuesta pasiva: “Tienes toda la razón, soy un inútil, por favor perdóname”.

Respuesta pasivo agresiva: “Bueno sí, lo que sea, en fin”.

Respuesta asertiva usando preguntas curiosas:

• ¿Específicamente qué fue lo que te molestó?

• ¿Cuáles fueron los errores que cometí?

• ¿Qué fue lo que no hice bien?

• ¿Que necesitas de mí?

• ¿Qué te gustaría que hiciera para solucionar esta situación?

Además de usar las preguntas curiosas, puedes complementar tu respuesta con comentarios asertivos en los que con educación y respeto dices cómo te sientes y con qué estás de acuerdo y con que no.

Volvamos al mismo ejemplo:

Critica destructiva: “Eres un inútil, todo el tiempo te estás equivocando, porque no puedes hacer las cosas bien”.

Pregunta curiosa y comentario asertivo: “Reconozco que me equivoque en esta situación y lo lamento. No es verdad que siempre me esté equivocando y sí hay cosas que hago bien. ¿Cómo crees que podríamos solucionar esta situación?”

En algunos casos la crítica puede llegar sin que tu hayas cometido un error. 

No debes disculparte cuando no has cometido una equivocación y el otro te está criticando injustamente.

Si cometiste un error discúlpate, de lo contrario no tienes por qué permitir que otra persona te trate mal.

Puedes ser compasivo con el otro, poniendo límites y haciéndote respetar.

En este caso, como parte de los comentarios asertivos, puedes incluir las técnicas 3 y 4, donde hablas del impacto que la crítica del otro causa en ti, haciéndote responsable por tus sentimientos y expresándolos en primera persona.

Veamos otro ejemplo, supongamos que un familiar con quien estás hablando está estresado porque está enfermo en el hospital. Tú estás intentando ayudarlo y te responde con agresividad:

Tú: “Ya es hora de que te tomes las pastillas que dejó el médico”.

Familiar estresado: “No me digas lo que tengo que hacer, me estresa. No seas tan controlador, deja de presionarme”.

Tú: “Entiendo que estas estresado y que estas pasando por un momento difícil. Cuando me dices controlador, yo me siento atacado y no valorado porque mi intención es ayudarte ¿De qué forma te puedo ayudar para que no te sientas controlado?”.